miércoles, 4 de marzo de 2020

Té Yogui, un té que despeja la mente

El maestro que llevó Kundalini Yoga a Occidente, Yogi Bhajan, llegó en el año 1969 a los Estados Unidos, y desde ese mismo momento comenzó a enseñar meditación y yoga.
Sus cursos y lecturas no sólo llegaron a abarcar la enseñanza de esta técnica, sino también se hacía eco de la antigua ciencia del Ayurveda, que utiliza las hierbas, la nutrición y otras artes para mantener la mente, el cuerpo y el espíritu saludables.
Después de cada clase, el maestro servía a sus alumnos un té hecho a base de especias aromáticas que había traído directamente desde la India, y que –afectuosamente- éstos llamaron Té Yogui.
Durante los años siguientes, concretamente durante la década de los años 70, esta bebida se comenzó a servir en algunos restaurantes vegetarianos tanto de Europa como de Estados Unidos.
Pero este té tuvo tanto éxito que empezó a ser vendido incluso en tiendas de comidas naturistas y herbolarios.
Fundamentalmente, el té Yogui “chaya” es una mezcla de varios ingredientes de especias o hierbas, siendo diferente en cada estación, mientras que su uso varía dependiendo del lugar, el clima, y los distintos desequilibrios de cada persona.

¿Cuándo es el mejor momento para tomar Té Yogui?

Muchos especialistas recomiendan beber este té antes o después de la práctica del Yoga, algo que, principalmente, se debe a que despeja la mente de problemas y preocupaciones, ayudando así a conseguir una mayor concentración.

Ayuda a que el practicante de Yoga se mantenga sano, y sienta un equilibrio tanto corporal como mental, al ser a su vez un antidepresivo natural que previene infecciones del sistema respiratorio, aumentando así las defensas generales de nuestro cuerpo.

Actúa como estimulante general, además de ser un buen sustituto del té negro o del café.

Beneficios:

El yogi tea, tiene beneficiosas propiedades como estimulante y revitalizante, idóneo para personas que no pueden tomar café ni té puesto que no contiene teina ni cafeina, regula el sistema nervioso y tonifica nuestro higado.

El sabor de esta infusión es bastante particular por su combinación, el aroma de canela se funde con el gusto picante que nos ofrece el jengibre y la pimienta.

El clavo alivia el dolor y fortalece el sistema nervioso, el jengibre es de sobra conocido como estimulante en procesos gripales, digestivo… el cardomomo, digestivo y buen aliado del colón, la canela estimulante y fortalecedora de los huesos, la pimienta digestiva.

Ingredientes:
  • 10 cemillas de cardamomo verde. 
  • 8 granos de pimienta negra. 
  • 8 clavos de olor. 
  • 6 revanadas de jengibre(aprox). 
  • 1 ramita de canela en rama. 
  • 2 cucharaditas de te en hebras. 
  • 1 tasa de leche(puede ser leche de soya). 
  • 2 tasas de agua(puede ser de grifo pero si es mineral mejor). 

Elaboración:
  • Colocar en un recipiente las dos tasas de agua, la pimienta, los clavos, la canela y el cardamomo,  llevar al fuego y cuando empiece a hervir dejar a fuego lento 15 minutos con el recipiente tapado para que no se evapore el agua.
  • Cumplidos los 15 minutos apagar el fuego y agregar el te en hebras y dejar reposar 5 minutos,
  • Colar y volver a poner el liquido obtenido nuevamente en el en el recipiente, agregando la leche y llevar al fuego nuevamente y calentar a gusto.
  • Servir endulzado con miel.